martes, 8 de junio de 2010

Teu olhar


Quando te encontro num profundo olhar feliz, explode todo meu corpo. Sao os medos estéreis perdidos. Nao conheço mais que o medo e a tua doçura, que nao se equivoca, espanta fantasmas que compreendo. O que seremos dentro de un segundo? Sao perguntas que lutam contra minha certeza. Una luta, fiel e viciada, que ja nao quero. É teu olhar profundo que me desconcerta. E me sento à porta, de costas, eu, que de frente, sempre esperei inimigos e tao bem sabia recebe-los. Da tua mao vou, perdida em encontros, vertigens, amanheceres eternos que fazen do meu pasado uma tremenda piada de mal gosto. É teu olhar o que me faz ver. E me sento à porta, entregue, confio, me deixo, estou de costas, esperando e sabendo a tua presença e tuas doces maos que afastan minhas tristes lembranças. Te presenteio o que sabes descubrir em mim, mil sorrisos e outros mil, cada pedaço de céu que voce me da, cada instante eterno. Te dou, nao meu corpo, senao minha alma e sou tua pela beleza de se-lo. É teu olhar, ese que me convida a ser feliz. Te vejo e te digo sim.

Tu mirada


Cuando te encuentro en una profunda mirada feliz, explota todo mi cuerpo. Son esos miedos esteriles perdidos. No conozco mas que el miedo y tu dulzura, que no se equivoca, espanta fantasmas que comprendo. Que seremos dentro de un segundo? Son preguntas que luchan contra mi certeza. Una lucha, fiel y viciosa, que ya no quiero. Es esa tu mirada profunda que me desconcierta. Y me siento a la puerta, de espaldas, yo que de frente siempre esperé enemigos y tan bien sabia recibirlos. De tu mano voy, perdida en encuentros, vertigos, amaneceres eternos que hacen de mi pasado un tremendo mal chiste. Es tu mirada la que me hace ver. Y me siento a la puerta entregue, confio, me dejo, estoy de espaldas, esperando y sabiendo tu presencia y tus dulces manos que ahuyentan mis tristes recuerdos. Te regalo lo que sabés descubrir en mi, mil sonrisas y otras mil más, cada pedazo de cielo que me brindás, cada instante eterno. Te doy, no mi cuerpo, sino mi alma y soy tuya por la belleza de serlo. Es tu mirada, esa que me invita a ser feliz. Te veo y te digo si.